“Toda la vida escuché decir que solo trabajando se puede salir adelante, que el esfuerzo y la perseverancia son la clave para cumplir cualquier sueño. Creo que esas palabras te marcan profundamente cuando las escuchás desde chico.” Manuel Calvo.
Mi nombre es Manuel Calvo, tengo 45 años y tres hijos: Juan, María Gracia y Pedro.
Nací en Las Varillas. A los 18 años me instalé en la ciudad de Córdoba para cursar mis estudios donde me gradué de contador público.
La primera vez que escuché hablar de esfuerzo y perseverancia fue de boca de mis padres.
Ellos me enseñaron que son dos valores fundamentales para que los sueños se cumplan. Quizá por eso hicieron todo lo que estuvo a su alcance para que tuviera la mejor educación posible.
Gracias a mis viejos pude estudiar en Córdoba y recibirme de contador público.
En Las Varillas aprendí lo que es la buena política, la que se pone al servicio de la gente y busca ayudarla a cumplir sus sueños.
Entendí que producir cambios reales era posible, y entonces encontré mi vocación: trabajar para que otros tengan las mismas oportunidades que yo tuve.
En cada uno de los lugares que me tocó ocupar, siempre busqué formar equipos y llevar adelante planes y acciones que le mejoren la vida a la mayor cantidad de gente posible.
Tuve el honor y la suerte de conocer a personas muy capacitadas. Con ellas pusimos en marcha programas innovadores, como el Ciudadano Digital, Conectividad Córdoba, Policía Ambiental y también sentamos las bases para la construcción de un Gobierno abierto.
El Gringo me honró y me dio una inmensa responsabilidad: acompañarlo como Vicegobernador, para esta gestión, en la fórmula de Hacemos por Córdoba. Y los cordobeses nos legitimaron ampliamente en las urnas.
Mi compromiso con ustedes es inmenso, y voy a trabajar incansablemente todos los días para no defraudar la confianza que nos brindaron.
Mi nombre es Manuel Calvo, tengo 45 años y tres hijos: Juan, María Gracia y Pedro.
Nací en Las Varillas. A los 18 años me instalé en la ciudad de Córdoba para cursar mis estudios donde me gradué de contador público.
La primera vez que escuché hablar de esfuerzo y perseverancia fue de boca de mis padres.
Ellos me enseñaron que son dos valores fundamentales para que los sueños se cumplan. Quizá por eso hicieron todo lo que estuvo a su alcance para que tuviera la mejor educación posible.
Gracias a mis viejos pude estudiar en Córdoba y recibirme de contador público.
En Las Varillas aprendí lo que es la buena política, la que se pone al servicio de la gente y busca ayudarla a cumplir sus sueños.
Entendí que producir cambios reales era posible, y entonces encontré mi vocación: trabajar para que otros tengan las mismas oportunidades que yo tuve.
En cada uno de los lugares que me tocó ocupar, siempre busqué formar equipos y llevar adelante planes y acciones que le mejoren la vida a la mayor cantidad de gente posible.
Tuve el honor y la suerte de conocer a personas muy capacitadas. Con ellas pusimos en marcha programas innovadores, como el Ciudadano Digital, Conectividad Córdoba, Policía Ambiental y también sentamos las bases para la construcción de un Gobierno abierto.
El Gringo me honró y me dio una inmensa responsabilidad: acompañarlo como Vicegobernador, para esta gestión, en la fórmula de Hacemos por Córdoba. Y los cordobeses nos legitimaron ampliamente en las urnas.
Mi compromiso con ustedes es inmenso, y voy a trabajar incansablemente todos los días para no defraudar la confianza que nos brindaron.